Jesús nos mandó a hacer discípulos de todas las naciones. El discipulado es el moldeamiento del destino de un individuo. Cada iglesia en el Nuevo Testamento copió el método de Jesús de llamar a aquellos a quienes Dios había elegido y entrenarlos a través del ejemplo y la liberación. El libro de los Hechos demuestra el impacto poderoso que es posible para aquellos que toman en serio el mandato y el patrón de Jesús. Nuestra visión es la restauración del patrón bíblico de crecimiento de la iglesia. En los últimos años, se han iniciado más de dos mil iglesias mediante este método.

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En cada una de las iglesias de la Comunión, se cumple el mandato de Cristo de hacer discípulos. Creemos que la iglesia necesita ser liberada. Creemos en el funcionamiento del Espíritu Santo y desafiamos a los miembros de la iglesia a encontrar la plena expresión y liberación de sus vidas de la manera que Dios lo desee. La Puerta de Lince presta gran atención a hacer discípulos, plantar iglesias y evangelismo mundial. Comienza en nuestra propia iglesia, en nuestra propia comunidad, y se extiende hacia afuera a cada estado y cada nación. Los miembros de La Puerta Lince están involucrados en una variedad de ministerios que van desde la limpieza de las instalaciones de la iglesia y los terrenos hasta la preparación y ejecución de los muchos ministerios, tanto visibles como invisibles, que funcionan semanalmente. Es en "el hacer" que encontramos "nuestro llamado". ¡Te desafío a encontrar tu llamado en la iglesia local!